
Brian Clough era un bocón.
Su esposa lo sabía. Sus hijos lo sabían. Sus amigos lo sabían y paulatinamente toda Inglaterra lo supo a medida que Clough fue acumulando milagro tras milagro.
Arrogante, prepotente, ególatra, la confianza en sí mismo era su principal cualidad. El poder de las ideas y de la mente eran oxigeno para este técnico. Cada conferencia de prensa que daba era un espectáculo de arrogancia, convicción y sentido del humor.
No demoraron entonces en compararlo con Muhammad Ali… El fallecido boxeador era especial. Su infinito talento solo podía equipararse con su carisma y habilidad con las palabras.
Ambos genuinamente creían que eran los mejores en su arte respectivo; genios a los cuales ese manto de “ser humilde” , de "dejarlo en manos de dios" les quedaba chiquito.
Para ese entonces Clough había llevado al Derby County de la segunda división a ganar la liga inglesa y a las semifinales de la Copa UEFA. Un milagro literalmente. Y la gente en Inglaterra martillando que “Clough era como Ali”…
Un día, invitado del programa “The Big Match”, Brian Clough no se sabía la sorpresa que le tenían.
Molesto por la comparación con el inglés, Muhammad Ali grabó un video donde pone al técnico en su lugar. “!Solo hay un Muhammad Ali! “iba a gritar el boxeador. “Aquí soy yo el que habla. ¡ Así que, Clough, ya he tenido suficiente, para!” (El video es espectacular, está en inglés pero no tiene pierde)
Ante el regaño, Clough atinó a decir que no le gustaría pelear contra él.
Un año después, en 1974, los dos iconos pudieron finalmente conocerse. Fue cordial, no pelearon.
Ya en su autobiografía Clough se refirió en estos términos al legendario boxeador:
“No he encontrado a mucha gente con más talento en su campo que yo en el mío, pero Ali era uno de esos pocos. Sobra decir que Frank Sinatra era otro”.
Su esposa lo sabía. Sus hijos lo sabían. Sus amigos lo sabían y paulatinamente toda Inglaterra lo supo a medida que Clough fue acumulando milagro tras milagro.
Arrogante, prepotente, ególatra, la confianza en sí mismo era su principal cualidad. El poder de las ideas y de la mente eran oxigeno para este técnico. Cada conferencia de prensa que daba era un espectáculo de arrogancia, convicción y sentido del humor.
No demoraron entonces en compararlo con Muhammad Ali… El fallecido boxeador era especial. Su infinito talento solo podía equipararse con su carisma y habilidad con las palabras.
Ambos genuinamente creían que eran los mejores en su arte respectivo; genios a los cuales ese manto de “ser humilde” , de "dejarlo en manos de dios" les quedaba chiquito.
Para ese entonces Clough había llevado al Derby County de la segunda división a ganar la liga inglesa y a las semifinales de la Copa UEFA. Un milagro literalmente. Y la gente en Inglaterra martillando que “Clough era como Ali”…
Un día, invitado del programa “The Big Match”, Brian Clough no se sabía la sorpresa que le tenían.
Molesto por la comparación con el inglés, Muhammad Ali grabó un video donde pone al técnico en su lugar. “!Solo hay un Muhammad Ali! “iba a gritar el boxeador. “Aquí soy yo el que habla. ¡ Así que, Clough, ya he tenido suficiente, para!” (El video es espectacular, está en inglés pero no tiene pierde)
Ante el regaño, Clough atinó a decir que no le gustaría pelear contra él.
Un año después, en 1974, los dos iconos pudieron finalmente conocerse. Fue cordial, no pelearon.
Ya en su autobiografía Clough se refirió en estos términos al legendario boxeador:
“No he encontrado a mucha gente con más talento en su campo que yo en el mío, pero Ali era uno de esos pocos. Sobra decir que Frank Sinatra era otro”.