
El Olympique de Marsella. Único campeón galo de la Liga de Campeones (en la temporada 1992-1993), este triunfo catapultó por siempre en el imaginario de los franceses a este club del sur del hexágono.
Pero como sucede en varios países (en particular en Colombia), como todo equipo grande su historia también esta manchada por grandes escándalos. Esta es la historia del mayor lunar en la historia de este equipo, y uno de los escándalos más recordados a nivel europeo.
El 26 de mayo de 1993 el "OM" (como le dicen los franceses con cariño a su equipo) vence 1-0 al Milan en la final de la Liga de Campeones. Aquella épica victoria contra el todopoderoso Milan marcaba el apogeo del ambicioso proyecto deportivo de Bernard Tapie. Poderoso magnate y hombre político, Tapie era una especie de Berlusconi versión francesa y tocaba con esa victoria el cielo con sus manos.
Pero en cuestión de días iba a pasar del cielo al infierno…
Cuatro días antes de la consagración europea, espeluznantes rumores sobre una tentativa de compra de partidos involucrando al Marsella iban a coger cada vez más peso. El OM, concentrado en ganar la Champions y también la liga local, habría intentado sobornar a varios jugadores del Valenciennes antes de un partido decisivo entre ellos. Tapie habría prometido sumas increíbles de dinero a tres jugadores, uno de ellos ni más ni menos que Jorge Burruchaga… campeón del mundo con Argentina.
En medio de rumores, el Marsella igual gana la Champions y la liga local… pero las investigaciones corroboran lo que todo el mundo veía venir: en el jardín de uno de los sospechosos yace enterrado un cofre con 40’000 euros comprobando así el escándalo.
A raíz de esto, en un hecho sin precedentes, la UEFA decide suspender al Marsella, campeón reinante, de la siguiente edición de la Liga de Campeones. No solo esto, el OM no puede jugar ni la Super Copa europea ni la Copa Intercontinental. De igual manera, le quitan la estrella ganada en la liga local.
En medio de una zozobra increíble, el Marsella debuta la siguiente temporada en la incertidumbre total. Y el peor de los castigos iba a caerles: pierden la categoría y deben jugar en la segunda división.
Bernard Tapie termina en la cárcel… y durante tres años el OM iba a estar en el infierno de la “B”. La herida de este escándalo ha tomado mucho tiempo en cicatrizar y solo recientemente el Marsella volvió a ganar la Ligue 1.
Aun así, ni la era dorada del Lyon, ni el presente ostentoso del PSG logran desbancar al Marsella como el club más popular de toda Francia.
Pero como sucede en varios países (en particular en Colombia), como todo equipo grande su historia también esta manchada por grandes escándalos. Esta es la historia del mayor lunar en la historia de este equipo, y uno de los escándalos más recordados a nivel europeo.
El 26 de mayo de 1993 el "OM" (como le dicen los franceses con cariño a su equipo) vence 1-0 al Milan en la final de la Liga de Campeones. Aquella épica victoria contra el todopoderoso Milan marcaba el apogeo del ambicioso proyecto deportivo de Bernard Tapie. Poderoso magnate y hombre político, Tapie era una especie de Berlusconi versión francesa y tocaba con esa victoria el cielo con sus manos.
Pero en cuestión de días iba a pasar del cielo al infierno…
Cuatro días antes de la consagración europea, espeluznantes rumores sobre una tentativa de compra de partidos involucrando al Marsella iban a coger cada vez más peso. El OM, concentrado en ganar la Champions y también la liga local, habría intentado sobornar a varios jugadores del Valenciennes antes de un partido decisivo entre ellos. Tapie habría prometido sumas increíbles de dinero a tres jugadores, uno de ellos ni más ni menos que Jorge Burruchaga… campeón del mundo con Argentina.
En medio de rumores, el Marsella igual gana la Champions y la liga local… pero las investigaciones corroboran lo que todo el mundo veía venir: en el jardín de uno de los sospechosos yace enterrado un cofre con 40’000 euros comprobando así el escándalo.
A raíz de esto, en un hecho sin precedentes, la UEFA decide suspender al Marsella, campeón reinante, de la siguiente edición de la Liga de Campeones. No solo esto, el OM no puede jugar ni la Super Copa europea ni la Copa Intercontinental. De igual manera, le quitan la estrella ganada en la liga local.
En medio de una zozobra increíble, el Marsella debuta la siguiente temporada en la incertidumbre total. Y el peor de los castigos iba a caerles: pierden la categoría y deben jugar en la segunda división.
Bernard Tapie termina en la cárcel… y durante tres años el OM iba a estar en el infierno de la “B”. La herida de este escándalo ha tomado mucho tiempo en cicatrizar y solo recientemente el Marsella volvió a ganar la Ligue 1.
Aun así, ni la era dorada del Lyon, ni el presente ostentoso del PSG logran desbancar al Marsella como el club más popular de toda Francia.