
Niños desplazados juegan fútbol en Soacha, Colombia, en 2010, un pais en donde incluso se les llamó "migrantes" para maquillar la realidad y sugerir que estaban paseando.
Niños refugiados persiguen en 1992 un balón en Sarajevo, antigua Yugoslavia ; en su imaginación, el tanque de las Naciones Unidas era probablemente el arco del San Siro.
Un niño refugiado sirio hace la "21" con la camiseta del Real Madrid. La vida lo tiene sufriendo en Erbil; es 2015 y para él, la vida misma se volvió como esa incierta "21" que quiere prolongar por siempre.
En el campo Za'atari de refugiados al norte de Jordán, "Messi" lucha un balón en 2012. Lo admira al argentino por su habilidad y velocidad, seguramente porque a él también le toca correr y driblar... cosas.
Dos niños juegan fútbol con un soldado de la OTAN en el Campamento de refugiado de Brazda, Macedonia en 1999. En ese instante los otros 24'998 refugiados albaneses restantes están preocupados por su incierto destino; ellos dos se están riendo detrás de un balón.
En 2012 los niños del pais recién constituido "Sudán del Sur" celebran la lluvia purificadora y su amigo el balón. "Cotejo" para reirse y celebrar en su campo de refugiados. No saben que, hoy, 13 de abril de 2017, parece que el genocidio ha empezado de nuevo.
Siempre habrá odio y violencia; corrupción y manipulación; políticos complices y cobardes.
Pero le garantizo que siempre habrá un balón congregando a los niños victimas de un conflicto; poniéndolos a soñar.
Niños refugiados persiguen en 1992 un balón en Sarajevo, antigua Yugoslavia ; en su imaginación, el tanque de las Naciones Unidas era probablemente el arco del San Siro.
Un niño refugiado sirio hace la "21" con la camiseta del Real Madrid. La vida lo tiene sufriendo en Erbil; es 2015 y para él, la vida misma se volvió como esa incierta "21" que quiere prolongar por siempre.
En el campo Za'atari de refugiados al norte de Jordán, "Messi" lucha un balón en 2012. Lo admira al argentino por su habilidad y velocidad, seguramente porque a él también le toca correr y driblar... cosas.
Dos niños juegan fútbol con un soldado de la OTAN en el Campamento de refugiado de Brazda, Macedonia en 1999. En ese instante los otros 24'998 refugiados albaneses restantes están preocupados por su incierto destino; ellos dos se están riendo detrás de un balón.
En 2012 los niños del pais recién constituido "Sudán del Sur" celebran la lluvia purificadora y su amigo el balón. "Cotejo" para reirse y celebrar en su campo de refugiados. No saben que, hoy, 13 de abril de 2017, parece que el genocidio ha empezado de nuevo.
Siempre habrá odio y violencia; corrupción y manipulación; políticos complices y cobardes.
Pero le garantizo que siempre habrá un balón congregando a los niños victimas de un conflicto; poniéndolos a soñar.